Operar una silla de ruedas eléctrica puede ser bastante simple. Primero debe encender el motor para que los cinturones de seguridad estén abrochados. Esto evitará que se caiga de la silla y se lastime. Después de eso, debe verificar que la batería esté completamente cargada y lista para funcionar. Si utiliza la silla de ruedas con frecuencia, se recomienda cargarla durante la noche. Una silla de ruedas eléctrica bien mantenida debe ser segura de usar y mantener. Para mantener la unidad en buenas condiciones, siga las instrucciones del fabricante.
A la hora de comprar una silla de ruedas eléctrica, lo primero que debes tener en cuenta es el tipo de mando. La mayoría de los sistemas de control son joysticks montados en el reposabrazos, pero también puede haber otros controles, como transferencias laterales y botones pulsadores. Algunas de las sillas de ruedas tienen controladores de sip-and-puff, que funcionan al soplar en un sensor. El tamaño y el peso de la silla de ruedas afectarán el tamaño del controlador. También está disponible un controlador de sorber y soplar. Si necesita comprar una silla de ruedas eléctrica más grande, deberá consultar al representante de ventas.
Otro aspecto importante de la compra de una silla de ruedas eléctrica es decidir si es el modelo adecuado para usted. La capacidad de peso de la silla es un factor importante a la hora de elegir la adecuada. Algunas sillas de ruedas eléctricas vienen con un límite de peso. Esto es importante porque no desea sobrecargarlo y no desea dañar la batería o el motor. En última instancia, debe conocer su límite de peso antes de comprar una silla de ruedas eléctrica. De lo contrario, deberá comprar uno nuevo, un error mucho más costoso que reemplazar el anterior.
La otra consideración es el estilo de la silla de ruedas. Una silla eléctrica de alta calidad puede ayudarlo a moverse en una variedad de entornos. Por ejemplo, puede ajustar la altura de su silla eléctrica. Si necesita viajar distancias más largas, debe considerar comprar una silla de ruedas eléctrica que le permita moverse libremente. Esto le ahorrará mucho tiempo y dinero en el camino. Si eres una persona con una gran discapacidad física y no puedes moverte con facilidad, deberías considerar comprar una silla eléctrica liviana.
Una silla de ruedas eléctrica es fácil de usar. Simplemente empuje el joystick hacia adelante. Escuchará un clic a medida que avanza. El joystick te permitirá dar la vuelta mientras avanzas. Simplemente apunte el joystick en la dirección que desea ir y la silla de ruedas comenzará a moverse. Es importante practicar con su silla de ruedas eléctrica antes de decidirse a comprar una. Querrás asegurarte de que estás seguro y feliz con el resultado.
El tamaño de una silla de ruedas eléctrica es una consideración crítica. Debe ser lo suficientemente grande para acomodar a la persona en él. Debe ser ajustable para que la persona en él pueda alcanzar y pararse fácilmente. La altura también es importante ya que puede afectar la vida útil de la batería. Si la persona que viaja en ella es demasiado pesada, las baterías y el motor pueden fallar, lo que provocaría un mal funcionamiento de la silla y lesiones. La capacidad de peso de una silla de ruedas eléctrica es un factor clave a la hora de seleccionar una silla de ruedas eléctrica.